La fogata de la batalla

Los dueños del universo, confabulan alrededor de esta fogata, buscando la manera de separar a la Driade de su Amor el Dragón.
Donde quiera que ellos pasen solo trampas ponen para ver sus caidas y por fin comprimir sus sentimientos a una caja de cristal sellada en el fondo del mar.
El más noble de los caballero, un dragón con flamas llenas de amor por la persona que cuidó de sanear su corazón.
Caminos de estrellas, fogatas e innumerables danzas en el inicio del cosmos, cayendo en el extasis del baile al coro de canciones hechas con las proezas de sus batallas sin yelmo ni espada.
Muchos han desatado sus iras, pero sus propios corazones calman el uno al otro, dando sed de vivir el siguiente día al lado de quien escogieron de compañero.
Muchos han sido los intentos, demasiados los que quicieron lo mismo, pero solo la nobleza del Sir Bahamut conquisto el corazón de una joven que sola buscaba Un castillo en sus sueños.
Grandes tropiezos, grandes historias, pero solo la pureza de los actos de Lady Nayaro conquistaron y abrieron de nuevo las puertas de su corazón en busca de ese castillo en sus sueños.
Ese castillos que los unió sus caminos encontrando el coloso en los ojos del otro. Mil caminos unidos en una batalla en que dos corazones y dos personas pasan a ser una, la larga historia que recién comienza, como la lluvia para la tormenta que ha de desatarse para llegar a ser libres... Aunque se conforman con estar juntos y felices por toda la vida.

Sueño eterno de un amanecer junto a tí, donde las estrellas nacen y mueren guiandonos al universo sin fín, uniendose y separandose, caminos de finos critales brillantes, reflejando en tus ojos el castillo de Morfeo, y guardando en una de sus habitaciones los secretos de todo esto. Estrellas que unen y separan nuestros caminos, días y años que no cuentan contigo rosas y espadas que no dañan con su filo, sentimientos atados en nuestras entrañas, jamás muertas por la guadaña. Soles muertos, lobos ambrientos, el corazón mio cerca del tuyo, el tuyo del mio.

Campos de batallas aflorados,

sombras de árboles tupidos,

largos parque recorridos,

el sueño eterno de un amanecer,

junto a ti para siempre.

Para tí, mi Sir Bahamut, que haces de un día un ensueño infinito del cual ambos disfrutamos, como el viaje alrededor del mundo, donde el tiempo es solo la forma hipotética que le dieron al cosmos para medirlo.

Soñar y jugar

En mi mente juego solamente
con un osito, un osito de felpa,
quiero ser niña, quiero jugar todo el día,
quiero ver un atardecer, en la playa pasar la noche.

Caminar en la arena, bailar con la luna,
cantar con las olas, sepultar sirenas muertas,
viajar con el viento, caminar como un elfo,
volar como un fénix, nadar como un delfín.

Sueño que soy niña y juego con mi osito,
juego que no hay frontera, que la vida es eterna.