4/22/2006

La niña y el cerezo. (Oda)

En el bosque
crece y crece,
el cerezo
de hojas verdes.
Una niña,
en este bosque
se aventurará,
nadie sabra
lo que pasara.
No se sabe,
en la vida
todo se vale,
terminará
viva talves.
Cosas increibles,
gente amable,
voces
recordará siempre.
La armonía
del Cerezo verde,
ella cultiva
hasta que el fruto madure.
El mundo gira,
y ella sigue viva,
nadie la encontró
porque ella siempre se camufló.
El lago flotante
pareciese que
siempre le dijiese
sigue adelante.
El futuro encontró,
en el destello del sol,
y tranquilidad tuvo,
cuando la luna la sostuvo.
Quien pensaría,
que de stos versos
saldría
una poesía,
con la historia
de una niña
que cultiva su vida
en un cerezo
que solo existió en mi imaginación.

Recuerdo del pueblo fantasma.

Es un solitario recuerdo que sólo vaga por el desierto,
el viento lo recoge y lo ayuda en su camino errante.
Yace en un pueblo fantasma, perdido y en calma,
y sólo en el atardecer sencibiliza su forma de ser.
En la tormenta el rayo lo despierta, días felices,
cara alegres, personas gentiles, iglesias gigantes,
todo en un pueblo en arenas cubierto.
Mujeres de alegre cantar,
hombres que del café sabían hablar,
jovencitas serviciales,
chaperones que acompañaban los bailes,
y el silencio reina ahora como los muertos en la guerra.
Sigue recorriendo vagabundo recuerdo,
solitario siempre buscando esa antigua gente.

Vida sin consuelo.

En las altas colinas
soy mujer celta,
sin conduel ni vida,
soy de un pueblo de guerreras.
Creyente de la naturaleza,
cuidadora de la criatura,
de facha indefensa,
con una espada,
la mejor guerrera.
~~
Con un pueblo oprimido,
solitaria diva,
del arte de curar al caido
su batalla aviva.
El sonido de la gaita
la alienta en su espera,
siendo que cuando camina,
la rodea una guerra.
~~
Siempre en la colina,
los verdes paisajes mira,
aprovecha el olor a campo
antes de salir a recorrerlo.
~~
Todo termina en vistorias,
pero ella aún te cuida,
tus heridas no estan selladas,
ella te cuida de la agonía.
Respetable mujer antigua,
tu recuerdo queda,
de una mujer guerrera
sin concuelo ni vida.
~~~

Historia de los árboles



Árbol,
cuánto tiempo has hablado
y nadie te ha escuchado.
Árbol,
cuánto tiempo has cantado
y nadie te ha oído.
Árbol,
cuánto tiempo has llorado
y nadie te ha consolado...
Muchas veces,
solitario eres,
otras,
sólo son tus hojas
las que te abandonan.
Querido árbol, recuerda que arriba, el sol,
no te deja solo.
En la noche oscura,
son los luceros que te acompañan
junto a la luna.
Por eso, querido árbol,
no te sientas solo,
son los luceros enamorados,
la luna amarilla,
y el sol radiante
quienes te cantan al son
de una cación,
hecha por el viento
y tus hojas son el coro,
que acoge al caminante,
tras el largo camino,
es el sauce llorón quien lo acogió,
y permitió de su sombra disfrutar
aquél día en que el sol
no dejaba la fresca brisa pasar.